Cuidado con determinada publicidad sobre los coronavirus

La página web «petsfarma.es» publica:

`El coronavirus no se transmite entre personas y perros o gatos. Los perros y gatos pueden contraerlo. Aunque no tendrá una afectación crónica, tendrán los síntomas y finalmente será eliminado a través de las heces´.

`Prevenir es la mejor forma de evitar que cualquier infección por coronavirus tenga efectos más allá de leves. El cuidado y el refuerzo de un sistema inmunológico sano son la mejor forma de prevención. Existen Piensos para perros y complementos nutricionales que van a aportar los elementos necesarios de refuerzo como ácidos esenciales, vitaminas, nucleótidos, inmunoglobulinas y probióticos necesarios para ese refuerzo´.

Efectivamente, el coronavirus no se transmite entre personas y perros o gatos, pero tampoco pueden contraerlo y tener síntomas y menos eliminarlo a través de las heces. De momento ningún perro y ningún gato ha tenido síntomas provocados por el virus SARS-CoV-2, que está provocando la enfermedad conocida como COVID-19.

Por tanto, ni tu perro ni tu gato, necesitan piensos especiales ni complementos nutricionales, ni ningún tipo de refuerzo, ante esta pandemia que, de momento, sólo padecemos los seres humanos.

La única manera de prevenir las enfermedades víricas es mediante el uso de vacunas, si es que éstas existen para enfermedades concretas, provocadas por coronavirus concretos, en nuestros animales de compañía.

La única información que, de momento, debes tener en cuenta sobre COVID-19 y animales de compañía es ésta:

Infografía del colegio de veterinarios de Madrid y la facultad de veterinaria de la UCM: nuevo coronavirus y los animales de compañía

Información sobre el perro que resultó ser «positivo» al virus en Hong Kong emitida por la WSAVA (Global Veterinary Community)

El perro resultó débilmente positivo para Covid-19.
Se analizaron muestras de hisopados nasales, orales, rectales y fecales del perro.

Los días 26 y 28 de febrero, los hisopados nasales y orales, mostraron resultados positivos, mientras las muestras del día 2 de marzo, mostraron resultados «apenas» positivos.
Las muestras rectales y fecales dieron resultados negativos los tres días.

La carga viral de los hisopados nasales y orales era muy baja. Se evidenció una pequeña cantidad de ARN viral en las muestras, pero no contenían partículas virales intactas, o sea, con capacidad de infectar.

El documento de la AFCD afirma que todavía NO existen evidencias que los animales de compañía incluyendo a perros y gatos, puedan ser fuente de infección para otros animales o personas. El sitio web de AFCD reitera y afirma además que «NO hay evidencia que los animales de compañía puedan ser infectados con el virus que causa la COVID-19, o que podrían ser una fuente de infección para las personas”.

La WSAVA recomienda que los tenedores de perros y gatos que viven en áreas donde hay casos conocidos de COVID-19 en humanos, continúen siguiendo las recomendaciones de este documento informativo, de lavarse las manos antes de interactuar con sus animales y, si están enfermos, utilizar mascarillas cuando están cerca de ellos.

Según nuestro compañero Leonardo Mauro: Hay que diferenciar la identificación de un virus en un animal que sufre una infección con ese virus, de otro que actúa solamente como vehículo mecánico (como pueden ser las manos de una persona). Este es el caso del perro de Hong Kong, en el que solo se encontró el virus en la superficie de la nariz y boca por contaminación ambiental (por convivir con una persona infectada con COVID-19) pero que NO está infectado. En este último caso la cantidad de virus será mucho menor que en el caso del animal infectado.

Los perros, además del Coronavirus entérico canino (alfa), pueden infectarse con Coronavirus (Beta) respiratorio canino, que pertenece al mismo grupo de virus que el SARS (2002), el MERS (2012) y ahora el SARS-CoV-2 (2019) que afectan a las personas. Este virus respiratorio canino se ha identificado en UK en 2003, y forma parte del Complejo Respiratorio Canino, antes llamada Tos de las Perreras o Traqueobronquitis infecciosa canina. 

Los gatos tienen sus propios coronavirus, entre los que se encuentra el del PIF (Peritonitis Infecciosa Felina).

Ejemplo:

Propietario infectado con COVID-19 que tiene un animal en su casa y nota que su perro comienza a presentar signos clínicos compatibles con cualquier enfermedad de tipo respiratorio. Esta persona está siendo supervisada muy de cerca por la autoridad sanitaria, pues se encuentra aislada en su domicilio. Lo primero que se dice es que se comunique telefónicamente con la veterinaria antes de mover a su animal. A esta altura la autoridad sanitaria que controla a la persona ya debería estar al tanto que el perro de esta persona comenzó a presentar signos clínicos respiratorios y estará tomando las medidas necesarias como se hizo en Hong Kong, sobre la forma de cómo intervenir en ese caso.

Otra posibilidad es que ese perro que pertenece a una persona aislada se enferme de cualquier otra cosa y deba concurrir a una clínica veterinaria y ahí el punto se complica, porque vamos a recibir en nuestras veterinarias a un animal que puede ser vehículo del SARS-Cov-2, y trasladarlo a nuestro centro.

De cualquier forma se señala que esto debe ser comunicado a la veterinaria antes de trasladar al animal. Por lo que a esta altura, estaríamos trabajando en conjunto con la autoridad sanitaria, que nos debería estar dando soporte.

Rogamos a la página web aludida, que retire o corrija la publicidad mencionada, entendiendo que no ayuda en nada a despejar las dudas que algunos responsables de animales de compañía, preocupados por la pandemia, nos plantean a diario a los veterinarios clínicos de animales de compañía sobre los coronavirus, y en concreto sobre el SARS-COV-2.

José Enrique Zaldívar Laguía. Veterinario.